Ya sean de porcelana, barbies o chochonas, las muñecas no pasan de moda, siempre han estado y estarán en nuestros hogares. El problema es que pueden llegar a acumular un montón de polvo y a la hora de limpiarlas no siempre resulta sencillo, los vestidos de las muñecas son delicados y corren el peligro de perder el color.
La limpieza depende un poco del material del que se trate, la antigüedad que tenga y también los detalles, como plumas, pedrería o encaje. Si solo tiene polvo lo mejor es lavarlo en seco pero si nos decidimos a mojarlos trataremos de no utilizar cloro o algún abrasivo demasiado fuerte.